Tras el éxito recibido por el juego de Cuphead, Netflix decidió que sería una buena idea hacer una serie animada basada en su historia. Después de todo, tenía todo lo necesario para dar el salto a la televisión: un elenco de personajes interesantes, un sentido del humor apto para todas las edades y un distintivo estilo artístico. Por todo esto, no es de extrañar que la serie haya resultado ser otro triunfo: siendo aclamada por la crítica y la audiencia gracias a su dirección de arte, banda sonora y calidad de animación. Y si bien actualmente solo hay dos temporadas disponibles en la plataforma, se ha confirmado que habrá una tercera entrega próximamente.
Es por ello que mientras esperamos el debut de sus siguientes episodios, hemos decidido hablarte más acerca del estilo tan característico que se ha usado para darle vida a todo el mundo de Cuphead y sus amigos. Esto por medio de la información compartida por Andrea Fernández acerca de su experiencia a cargo de la dirección de arte en Netflix, misma que compartió durante una conferencia exclusiva en el Festival Pixelatl 2022. Cabe destacar que Andrea además ha trabajado con otros grandes estudios, como Disney, Cartoon Network y Nickelodeon, no obstante, considera que The Cuphead Show ha sido uno de los proyectos más ambiciosos que ha realizado. A continuación te presentamos la información más relevante al respecto.
DIRECCIÓN DE ARTE EN ESCENARIOS
Durante su desarrollo, el juego de Cuphead contó con alrededor de 25 a 30 fondos, mismos que iban apareciendo a lo largo de los distintos escenarios. Y debido a que fueron elaborados manualmente mediante acuarelas y con una gran atención al detalle, fue un proceso que tomó aproximadamente 7 años en completarse. Para poner las cosas en perspectiva, para la serie animada se tenían únicamente 2 años y medio para hacer alrededor de 500 minutos de contenido. Y si bien no replicaron tal cual el proceso de elaboración, los artistas en The Cuphead Show sí debían emular el estilo y acabado artístico del juego.
Para lograr esto, primero que nada comenzaron a reunir múltiples referencias a partir de las series animadas clásicas de 1930, mismas que sirvieron como base al juego. El único problema es que está década presentó una gran variedad de estilos: desde las primeras caricaturas de Mickey Mouse y Popeye hasta cintas animadas como Blanca Nieves y los Siete Enanos. Fue trabajo de Andrea el tener que definir exactamente todos los elementos en común para poder usarlos de base en la dirección de arte para The Cuphead Show.
Una vez que se establecieron las principales referencias a seguir, Andrea inició la fase de exploración y arte conceptual mediante bocetos a mano del hogar que habitan Cuphead y Mugman. Su objetivo era crear una locación icónica que fuera instantáneamente reconocible, tal como la piña en la que vive Bob Esponja o la Cabaña del Misterio en Gravity Falls. De igual manera, a partir de esos bocetos se eligieron los elementos de diseño que habrían de implementarse en el resto de los escenarios a lo largo de la serie animada.
“Simultáneamente me estaba preguntando cómo rayos iba a hacer cientos de pinturas en acuarela para todos los escenarios. Mi equipo y yo nos tomamos 6 meses en hallar una solución y tener listo el primer fondo, logrando emular el acabado necesario y estableciendo un método que no nos llevase tanto tiempo”. – Andrea Fernández, encargada de dirección de arte en The Cuphead Show.
El problema fue que cada artista tenía un método diferente para hacer sus pinturas y sumado a esto, también había otro equipo en Irlanda que hacía las cosas a su manera. Una vez que tuvieron listas las bases de este proceso, Andrea y su equipo experimentaron con que tan detallados podían hacer los fondos sin retrasarse con las fechas de entrega establecidas. Esto llevó a la creación de un manual, donde se detallaron todas las instrucciones y herramientas necesarias para el proceso: desde el pincel utilizado hasta las texturas y el nivel de opacidad exacto. Esto permitió que los artistas pudieran crear cientos de pinturas digitales que simulan el acabado de las acuarelas en una cantidad mucho menor de tiempo.
ESTEREOSCOPIA Y SETS DE STOP MOTION
Sumado a todos estos retos, también se decidió crear sets y escenarios reales, como si se tratase de una producción de stop motion, para implementarlos en la animación 2D mediante estereoscopía. Esta es una técnica utilizada para crear la ilusión de volumen y profundidad en una imagen plana. Esto se logra al crear una composición con dos imágenes bidimensionales, sin embargo, cada una de ellas se presenta a cada ojo por separado. Al visualizarlas juntas, el cerebro lo interpreta como una sola imagen 3D, aunque de forma rudimentaria.
En resumen, se utilizaron fondos en live action sobre los cuales sobreponer la animación. Para ello se contó con la ayuda de Screen Novelties, quien también realizó animaciones en stop motion para la serie. Ellos se encargaron de construir los sets en base a los diseños dibujados por Andrea, quien también tuvo que supervisar desde la iluminación hasta el movimiento de las cámaras al momento de grabar. Todo esto con el fin de crear el encantador mundo que Cuphead y sus amigos habitan. Sin duda esta es una de las razones por la que la dirección de arte en la serie ha sido tan elogiada.
“Desde las pinturas de los escenarios y la paleta de colores hasta el delineado y los efectos, todo es evaluado en base a si era posible haberlo hecho en la década de 1930. Si algo se siente muy moderno o está fuera de lo que hubiera sido posible en aquel entonces, tenemos que ajustar el proceso”. – Andrea Fernández, encargada de dirección de arte en The Cuphead Show.
ANIMACIÓN DE PERSONAJES
Algo que era común en la década de 1930 era utilizar la rotoscopia para animar a los personajes. Esta es una compleja técnica que involucra la grabación de escenas en vivo con personas reales, tras lo cual el equipo de animadores renderizan los fondos, cuadro por cuadro, dando como resultado una animación mucho más realista y vívida. El equipo creativo en la serie consideró hacer algo similar, especialmente durante las escenas musicales en que ciertos personajes realizan bailes y toda clase de movimientos. No obstante, hubo un artista de storyboard que se encargó de realizar los paneles detalladamente para una de esas secuencias musicales y lo hizo tan bien que no fue necesario usar rotoscopia.
Adicionalmente, para cumplir las fechas de entrega que requiere una plataforma de streaming como Netflix, los artistas de Lighthouse Studios utilizaron marionetas 2D en Toon Boom Harmony para realizar la animación. Aún así, el proceso necesitó varios ajustes manuales para realizar las poses especiales de varios personajes. Se adaptó el pipeline para incorporar elementos dibujados a mano y animados tradicionalmente cuadro por cuadro, terminando con sombras compuestas en cel para obtener el acabado deseado. Pero esto a su vez ayudó a mantener cierta esencia de las técnicas tradicionales que hicieron al juego tan destacado.