Diseño de Personajes y Arte Conceptual de Demon Slayer

Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba es un anime basado en el manga del mismo nombre, creado por Koyoharu Gotōge. Su historia nos presenta las aventuras de un joven llamado Tanjiro Kamado, un joven que sufre una terrible tragedia: al regresar un día a casa, se encuentra con que toda su familia ha sido masacrada con excepción de su hermana menor, Nezuko, la cual se ha convertido en demonio. Logrando controlarla, Tanjiro inicia un largo y peligroso camino con tal de convertirse en un cazador de demonios. Su objetivo: acabar con todos ellos y lograr hallar una cura para que su hermana vuelva a la normalidad.

Considerada como una de las obras más exitosas a nivel mundial, el manga de Demon Slayer ha logrado vender más de 150 millones de copias. Debido a esto, en 2019 llegó su adaptación al anime con 26 episodios, siendo producida por el estudio UfoTable. Este es conocido por haber realizado otras producciones animadas como God Eater, Garden of Sinners y Fate/Zero. Como era de esperarse, el anime de Demon Slayer resultó ser otro rotundo éxito, siendo elogiado por sus escenas de acción y efectos especiales que se integran perfectamente con la animación tradicional de los personajes.

Todo esto le valió diversos premios y galardones, incluyendo el distinguido título de Mejor Serie de Anime del Año. Hay que destacar que sitios como Crunchyroll, Polygon e IGN incluso listan a Demon Slayer como una de las mejores series de anime de la década. Por si todo esto fuera poco, tras la conclusión de su primera temporada se anunció que la historia continuaría a través de una película animada titulada “Demon Slayer: Mugen Train”. Esta seguiría directamente a lo acontecido en el anime y adaptaría el siguiente arco en la historia original del manga. Además de ser producida también por UfoTable, se confirmó el regreso del elenco original de voces para su producción.

En esta ocasión, Tanjiro, Inosuke y Zenitsu abordan un tren donde ocurren misteriosas desapariciones a lo largo del viaje. Sin embargo, desconocen que un demonio también está a bordo del tren y ha preparado una trampa para ellos. Afortunadamente cuentan con la ayuda de Rengoku, uno de los espadachines más fuertes entre todos los cazadores de demonios. Y es que tal como era de esperarse, al igual que el manga y la serie de anime, la cinta animada de Demon Slayer representó otro éxito absoluto para la franquicia: al recaudar más de $469 millones de dólares.

Esto la ha convertido en la película de animación japonesa más taquillera de la historia, superando a otras populares producciones como El Viaje de Chihiro y Your Name. No solo eso, sino que también terminó el 2020 como la cinta más exitosa del año, siendo la primera vez que este título no es otorgado a una cinta estadounidense. Con todo este tremendo éxito, se confirmó que la segunda temporada del anime llegaría en el transcurso del 2021, de la mano de los artistas de Ufotable.

Es por ello que en esta ocasión venimos a presentarte una parte del proceso creativo detrás de su producción: por medio del arte conceptual utilizado para sus escenarios así como el diseño de personajes utilizado para su adaptación al anime.

El arte conceptual es integral para cualquier tipo de proyecto audiovisual. Después de todo, es aquí donde se sientan las bases que ayudan a la creación de todos los elementos visuales en una producción: desde sus personajes y escenarios hasta escenas cruciales en su historia. Y aunque es cierto que hay casos donde el resultado final no tiene tanta semejanza con el arte conceptual, sin duda este proceso influye de manera significativa en el resto de la producción.

Por otra parte, el correcto diseño de personajes puede hacer toda la diferencia a la hora de que un proyecto logre triunfar. Estos hacen que la audiencia se relacione emocionalmente con ellos y que por lo tanto, disfruten más de la trama. A continuación te mostramos ejemplos de todo esto, tomando como referencia el trabajo realizado por los artistas en el anime de Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba.