Hoy en día es impensable pensar en alguna película que no haya tenido un equipo encargado de la producción de VFX en alguna u otra forma. Desde efectos visuales que acompañan el uso de animatronics como fue el caso de Jurassic Park, hasta la creación completa de sets y personajes enteros como ha ocurrido en Star Wars. También están los ejemplos donde el resultado es un desastre, como aconteció con la primera película del Increíble Hulk por allá de 2003.
Recientemente una de las aplicaciones más usadas de vfx es sin duda en el rejuvenecimiento de diversos actores, que por alguna razón deben aparecer más jóvenes en las películas, un recurso especialmente utilizado en escenas de flashbacks o incluso historias que involucran viajes en el tiempo. Esto lo hemos podido apreciar en filmes como Capitán América: Civil War, Capitana Marvel y Terminator: Genisys, y más recientemente en Gemini Man, donde Will Smith se enfrenta a una versión más jóven de sí mismo. El equipo de efectos visuales detrás del proyecto tuvo la difícil tarea de crear una réplica digital foto realista del actor, con todas sus peculiaridades, gestos y sutilezas que lo volvieran totalmente creíble en la gran pantalla. Parece algo salido del universo de Blade Runner, ¿cierto?
La tarea se volvió más complicada cuando el director Ang Lee decidió filmar la película en un formato más elevado de cuadros por segundo, eliminando todo rastro de desenfoque por movimientos rápidos que pudieran ayudar a disimular y esconder cualquier detalle o imperfección de los efectos digitales.
“Es a lo que yo llamo una sinfonía de elementos que trabajan en conjunto para convencernos de que estamos viendo a un ser humano real. Desde todas las microexpresiones que una persona hace cuando estás hablando con ella, hasta la melanina en su piel y como la luz interactúa con ella.” Bill Westenhofer, supervisor de efectos visuales.
Antes siquiera de comenzar a trabajar con Will Smith, el equipo de Weta Digital reunió todas las referencias posibles del actor para así construir un modelo digital idéntico en cada detalle hasta en los poros de la piel. Posteriormente pasaron largas horas trabajando sobre el rodaje, rejuveneciendo al actor mediante efectos visuales y mapping. A pesar que el equipo de Weta tenía amplia experiencia gracias a su trabajo en la última saga del Planeta de los Simios, se necesitó de 500 artistas experimentados y cerca de dos años de trabajo arduo para lograr el resultado.